Palacio de La Aljafería

La Aljafería de un vistazo

Atravesando los muros de la imponente fortaleza, nos encontramos con siglos de historia retratados a través de la intensa vida del “Palacio de la Alegría”.

El corazón del Palacio de la Aljafería alberga tres palacios pertenecientes a distintas épocas que pueden presumir de diferentes estilos.

Extendiéndose en torno a un hermoso patio rectangular protegido por una densa vegetación, el antiguo palacio islámico conserva sus arquerías originales, además de diferentes salas con una delicada decoración.

Continuando con el recorrido, nos encontramos con los restos del palacio cristiano medieval, un espacio que se convirtió en el palacio de los reyes de Aragón tras la reconquista de Zaragoza en el año 1118. En esta zona merece la pena dirigir la mirada a las alturas para contemplar los bellos alfarjes que se conservan en los techos.

Avanzando por el palacio y en la línea del tiempo, nos encontramos con el palacio de los Reyes Católicos, erigido en el año 1492 para mostrar el poder y prestigio de los monarcas. En esta zona destaca especialmente el imponente salón del trono, un espacio en el que la herencia artística medieval se funde a la perfección con los más bellos aportes renacentistas.

Las últimas reformas del palacio lo adaptaron como acuartelamiento proporcionándole su aspecto militar y, actualmente, después de una larga e intensa vida, desde el año 1987 una parte de la construcción pasó a convertirse en la sede de las Cortes de Aragón.

Visitar el Palacio de la Aljafería

El Palacio de la Aljafería es una de las visitas imprescindibles de Zaragoza y son pocos los turistas que visitan la ciudad y no se acercan a descubrir sus instalaciones.

A la hora de hacer la visita, tenéis la opción de recorrer el palacio por vuestra cuenta con ayuda de una audioguía, o bien recorrerlo con un guía que os ayudará a descubrir su historia y arquitectura (las visitas guiadas solo se hacen en algunos horarios que se pueden consultar en su web).